El equipo de gobierno tumba los principales puntos de una moción de la socialista Begoña Medina que pide incrementar presupuesto en la captura, esterilización y retorno de los felinos a su lugar habitual, porque la falta de identificación imposibilita la vuelta a su hogar
La socialista denuncia que “el equipo de gobierno no se molesta en limpiar los imbornales de la ciudad, principal motivo por el que la ciudad se inunda cuando caen dos gotas de agua”
La viceportavoz socialista, Begoña Medina, ha lamentado “el incumplimiento del Ayuntamiento de Málaga” de la Ley de Bienestar Animal, que echó a andar en septiembre de 2023, porque “el PP se ha negado a implantar “un plan de gestión de las colonias ferales en la ciudad, incrementando recursos para garantizar una mejora de la calidad asistencial a los gatos de la ciudad. Así lo ha expresado Medina tras ver cómo seis de los puntos principales de la moción que ha defendido durante la comisión de Sostenibilidad Ambiental no han salido adelante por los votos en contra del equipo de gobierno.
Entre los puntos de la moción tumbada por el PP se encuentra la petición de un protocolo de conciliación entre vecinos colindantes con las colonias ferales y los responsables de estas áreas, con el fin de acabar con disputas por la permanencia de los gatos en el entorno. “La ciudadanía debería conocer que entre las ventajas de contar con una colonia de gatos cerca está la contención de plagas de ratas y de insectos”, a la vez que ha denunciado que “por la ausencia de identificación de los felinos, muchos de los capturados por los funcionarios municipales no retornan a su lugar de origen”. Precisamente, desde las asociaciones animalistas denuncian maltrato en las capturas, además de que “los encierran en gateras en el Centro de Protección Animal Municipal que parecen microondas”, donde conviven con el frío y con sus propias necesidades por la falta de limpieza.
El PP ha votado en contra además de incrementar las partidas presupuestarias del Ayuntamiento para dotar de microchip a los gatos ferales, para mejorar las labores de desparasitación y la vacuna de la rabia. También se ha opuesto a garantizar el control de las capturas por parte de personal no municipal. “Nos encontramos con jaulas trampa que no son del Ayuntamiento, mientras que el equipo de gobierno no publica en la web la información sobre estas capturas ni sobre los gatos que llegan al zoosanitario”. Medina ha recriminado al equipo popular que “se limitar a asumir las mínimas exigencias de la Ley de Bienestar Animal. Destinan recursos muy escuetos, apenas 40.000 euros, mientras que las voluntarias de las colonias ferales ponen de su bolsillo lo necesario para comprar el piensa y esterilización cuando la administración no llega a hacer su trabajo. Hay colonias que llevan hasta un año esperando respuesta para su solicitud de mediación”, ha zanjado la socialista.
Durante el debate de la moción ha tomado la palabra Eva Magú, que gestiona tres colonias ferales, la 90, la 133 y la 171 en el distrito Este, y que se ha dirigido directamente al equipo de gobierno: “Mi pregunta es si el Ayuntamiento de Málaga tiene la intención de cumplir con la Ley de Bienestar Animal, que está en vigor desde el 29 de septiembre de 2023, que cuenta con un mar pionero en la protección de las colonias ferales”. Magú ha animado a la bancada popular a seguir la estela de otros ayuntamientos de la provincia. “Miren a sus vecinos en Rincón de la Victoria, que con menos presupuesto ha contratado a más personal tiene acuerdos con el Colegio de Veterinarios, además de un plan de actuación puesto en marcha desde hace años”.
Limpieza de imbornales
Durante la misma comisión no han salido adelante los puntos esenciales de una moción de Begoña Medina para garantizar la limpieza de las canalizaciones de pluviales en la ciudad de Málaga. “Cuando caen dos gotas, nuestra ciudad se inunda porque el alcantarillado se atora por la falta de limpieza y control”, ha dicho la socialista enseñando la foto de un imbornal en el barrio de La Luz por el que asoman plantas. “Si aquí se reproduce vegetación es que imbornales como éste no se mantienen limpios”, ha advertido la responsable socialista. Los imbornales son las aperturas practicadas en la calzada, normalmente debajo del bordillo de la acera, para evacuar el agua de lluvia o de riego. Son herramientas “muy necesarias para canalizar las pluviales, pero muchos barrios se inundan porque no se limpian”, ha señalado la socialista.
Los votos en contra del Partido Popular han tumbado la iniciativa para dotar a Málaga de un plan de acción en el alcantarillado de la ciudad. “Se trata de efectuar trabajos de manera regular y que se informe de ellos en la página web de EMASA”. Además, la responsable de esta empresa municipal ha señalado a los concejales del PP que se vote en contra de la mejora del mantenimiento de la red de imbornales, intensificando las labores de inspección y seguimiento. La propuesta de Medina pasa por que los trabajadores de las empresas concesionarias de Parques y Jardines limpien estos imbornales en sus áreas de trabajo, en zonas verdes y parques. “Las plantas no tienen que crecer en estos imbornales, no es su lugar, porque atoran la canalización y generan un grave problema en los barrios anegando locales comerciales y pisos en planta baja”. En este punto, la responsable socialista se ha ganado el apoyo de todos los grupos municipales, al igual que en su propuesta para separar, “de manera paulatina”, las tuberías de aguas residuales que todavía están conectadas a la red de pluviales. “Las canalizaciones en la ciudad de Málaga no se han actualizado en décadas. Es momento de que se haga”, ha zanjado Begoña Medina.