El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha conseguido aprobar por mayoría absoluta la negativa a la implementación del pin parental en Andalucía, con los votos a favor de los grupos municipales Adelante Málaga y Ciudadanos, dejando sólo al alcalde Francisco de la Torre en una imposición que “evitaría que nuestros niños y niñas puedan conocer qué es la violencia machista en las aulas”
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha celebrado que Ana Orantes Ruiz, cuyo asesinato a manos de su exmarido en el año 1997 inició una larga carrera en la lucha contra la violencia de género en nuestro país, “tendrá finalmente una calle en la ciudad de Málaga después de que el Pleno haya rectificado al alcalde”. Así lo hará tras conseguir la unanimidad para el primer punto de una moción urgente, aprobado por todos los grupos municipales, después de que el pasado 15 de marzo el alcalde firmara “de puño y letra el decreto de la vergüenza”, un dictamen de la comisión de calles que negaba precisamente la nominación de una vía como Ana Orantes Ruiz porque “no era malagueña”.
El socialista ha recordado que “Paco de la Torre tuvo que rectificar ayer ante el revuelo suscitado por esta decisión de la Comisión de Calles, una decisión que no era de recibo”. Pérez ha expresado que “la ciudadanía espera que dentro de 24 años, nuestros niños y niñas puedan ver la placa con el nombre de Ana Orantes Ruiz y lean un texto que explique qué significó su asesinato para la lucha contra la violencia de género”. Pérez ha agregado que “Ana Orantes Ruiz fue asesinada en el año 1997, pero tuvo que llegar un gobierno socialista en 2004 para llevar a cabo un cambio legislativo que culminaría con la aprobación de la Ley Integral de la Lucha contra la Violencia de Género”.
El líder socialista ha defendido esta moción para evitar “que sea una comisión la que decida de manera arbitraria a quién se le concede una calle y a quién no”. Según Pérez, el 22 de febrero de 2018, a propuesta de aprobación de oficio solicitada por el área de Cultura le dio la denominación de un espacio público al exconcejal del PP Antonio Garrido Moraga. Sí, se lo merecía, pero lo que quiero señalar es que en tan sólo 28 días se le concedió un lugar exacto en nuestras calles, en una plaza. En ese momento no hubo deliberación por parte de la Comisión de Calles, una parcialidad que no se entiende. Estamos a tiempo de rectificar este decreto de la vergüenza y que todos salgamos unánimemente aprobando esta moción, que lo único que hace es visibilizar la lucha contra la violencia de género, contra la violencia machista”, ha zanjado sobre este asunto Daniel Pérez. El socialista le ha espetado al regidor que “esta arbitrariedad no se dará con un gobierno socialista en Málaga. Porque cuando usted deje de ser alcalde, tendrá su nombre en una vía de la ciudad, en una calle que sea visible, y no escondida como la que lleva el nombre de Pedro Aparicio”.
De la Torre se queda solo defendiendo a la extrema derecha
“Nosotros queremos que este Ayuntamiento se opongan a ese pin parental que sirve para que un padre en un momento determinado quiera impedir que el testimonio de Ana Orantes se pueda ver en un instituto el día 25 de noviembre. Eso sí es adoctrinamiento por parte de la extrema derecha y esperemos que el alcalde de la ciudad y Ciudadanos se opongan al pin parental”. El portavoz socialista lo ha expresado así durante la defensa del segundo acuerdo de la moción, para que el Ayuntamiento de Málaga se oponga en bloque a la imposición de “esta artimaña de la extrema derecha en las aulas”. Finalmente, el alcalde “se ha quedado sólo al votar en contra de este acuerdo, sólo en su defensa a la imposición de una medida VOX para evitar que se hable de la violencia de género en los colegios e institutos”. La concejala de Ciudadanos, Noelia Losada, ha votado a favor de este punto.
Según Pérez, “la violencia machista no se ha erradicado, es una lacra que nos persigue y cuya lucha Vox quiere impedir, primero al proponer el cambio de la sentencia violencia de género por violencia intrafamiliar. También, obligando al Gobierno de la Junta de Andalucía a que el 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, los alumnos andaluces no puedan conocer el relato de Ana Orantes en las aulas”.
Por su parte, Dolores Rodríguez, representante de la Plataforma contra los malos tratos a las mujeres Violencia Cero, ha recordado que el 13 de noviembre de 2019 ya se aprobó por unanimidad en el Consejo Sectorial de la Mujer, incluso con el voto del alcalde de la ciudad, que Ana Orantes Ruiz tuviera una calle. “Más de un año después estamos aquí votando lo mismo”. Rodríguez ha recordado además que en el seno de ese consejo se votó a favor del cambio de la ordenanza reguladora de la rotulación de las calles para que esta decisión se tomara en el seno del Pleno de la ciudad, “al igual que ya ocurre en otras ciudades andaluzas, como es el caso de Sevilla y Cádiz”.
“Su muerte a los 60 años no sólo conmocionó a la opinión pública, sino que provocó un revulsivo legislativo que promovió la reforma del Código Penal y posteriormente la aprobación en diciembre de 2004 por el voto unánime de todos los partidos de la Ley Orgánica 1/2004 del 28 de diciembre, de medidas de protección integral contra la violencia de género. El asesinato de Ana Orantes abrió los ojos a los poderes políticos y legislativos para visibilizar la dimensión de la violencia de género. la poca conciencia social que existía, el respeto y la desprotección en la que se encontraban las mujeres y las víctimas. La denuncia de Ana Orantes fue valiente y revolucionaria en un país donde hasta ese momento no se hablaba de la violencia hacia las mujeres. Su muerte significó la salvación de miles de mujeres en nuestro país”.