El portavoz socialista, Daniel Pérez, defiende que “en pleno siglo XXI no vamos a permitir la opacidad en el Ayuntamiento por deseo expreso del PP y de Ciudadanos” y que “los malagueños deben conocer toda la información que el alcalde oculta sobre los chiringuitos municipales, como es el caso de Promalaga, con el supuesto cobro de mordidas en contratos, y con el CAC, cuya dirección ha cobrado cantidades abultadas de dinero público con el centro cerrado y sus trabajadores en ERTE”
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha informado que “el grupo socialista convocará un pleno extraordinario y urgente para revocar el funcionamiento opaco de la comisión de transparencia”, después de que el equipo de gobierno, formado por PP y Ciudadanos, haya retirado del orden del día dos mociones socialistas para pedir información sobre Promalaga, con el cobro de supuestas mordidas del 10% en contratos firmados por su exdirector económico y financiero, y “sobre el Centro de Arte Contemporáneo, donde la empresa que lo gestiona ha cobrado cantidades abultadas de dinero público con el centro cerrado y sus trabajadores en ERTE”.
Para el líder socialista, “el alcalde Paco de la Torre no debe esconderse tras la opacidad, debe explicar por qué utiliza el Ayuntamiento para pagar chiringuitos donde coloca a los suyos, mientras evita que la oposición tenga toda la información para realizar su labor de fiscalización”. Así, “en pleno siglo XXI no vamos a permitir la opacidad en el Ayuntamiento por deseo expreso del PP y de Ciudadanos”, de ahí que se convoque este pleno extraordinario.
“Lo podemos convocar, porque el PSOE cuenta con ediles suficientes para convocar plenos extraordinarios, así que haremos uso de esta herramienta contemplada en el Reglamento de Pleno, para que aquellos elementos que no se han podido debatir en esta comisión de transparencia descafeinada por el alcalde se pueda hacer en el órgano representativo de los malagueños y de las malagueñas. Ya está bien de tomarnos el pelo a todos y todas”, ha exclamado Daniel Pérez.
Según el edil socialista, “no se puede hablar de un Ayuntamiento transparente cuando a las primeras de cambio se da un portazo a la petición de información que realizan los representantes de los ciudadanos”. Además, Daniel Pérez ha revelado que la decisión de dejar fuera dos mociones del PSOE, relativas a la falta de información sobre Promalaga y el CAC, “fue decisión exclusiva del alcalde, se puede comprobar a través de una resolución de Alcaldía, quien prefirió dejar fuera asuntos que no benefician en nada a su nefasta gestión municipal que, como siempre, tiene la sombra de la sospecha sobre el apartado económico”.
Los socialistas tachan “esta decisión de Paco de la Torre como un secuestro del derecho a la información de los concejales del Ayuntamiento, por ende de los ciudadanos de Málaga”. Y es que “además de dos años en celebrarse esta comisión de transparencia, se ha hecho mal, es una pantomima. Los socialistas querían “arrojar luz y taquígrafos sobre lo que pasó en Promalaga”, con supuestas mordidas del 10% cobradas a proveedores por el exdirector económico financiero, Francisco Muñoz Montes, despedido en septiembre de 2020 tras iniciarse investigación policial y que ha sido indemnizado con 180.000 euros por parte del Ayuntamiento de Málaga.
Sobre el Centro de Arte Contemporáneo, el socialista ha recordado que “durante los meses que el CAC estuvo cerrado en los meses más duros de la pandemia la empresa facturó cantidades igualmente abultadas, pese a tener a sus trabajadores en ERTE, ganando más dinero neto por este contrato la empresa adjudicataria”. Desde el PSOE han expresado que la empresa Gestión Cultural y Comunicación SL “aplicó un controvertido ERTE durante el pasado confinamiento, una medida criticada igualmente en ese momento por el equipo de gobierno al considerarla “absolutamente injustificada”. Pese a ello, “tras ver el expediente, comprobamos que a la concesionaria le fue muy bien con el cierre, ya que en marzo de 2020, en pleno confinamiento, facturó al Ayuntamiento 232.036 euros; en abril 199.133 euros, y en mayo 218.992 euros. En junio se volvió a la factura habitual, ascendiendo a 270.281 euros”, todo ello “con las puertas cerradas al público”, ha zanjado Daniel Pérez.