Populares y naranjas votan en contra de que el Ayuntamiento de Málaga exija a la Junta de Andalucía que recupere la concesión del único centro de Educación Infantil de Carretera de Cádiz que, tras el remate de su actividad a finales de marzo, “dejará a 109 niños y 14 trabajadores en la calle
En la defensa de una moción conjunta de PSOE y Unidas Podemos, el concejal socialista Rubén Viruel ha recriminado a los grupos PP y Ciudadanos por su “falta de valentía para la defensa de los 109 niños y niñas, además de los 14 trabajadores que se van a quedar en la calle tras el cierre de la guardería La Paz”, gestionada en el distrito de Carretera de Cádiz por la empresa Arunda. Tras la intervención de Mercedes Ocaña, una de las madres afectadas por el cierre, el edil socialista ha recordado que “esta guardería es también historia de la barriada, pues cuenta con medio siglo de servicio en la zona, donde las familias que hoy llevan a sus hijos e hijas a esta escuela fueron alumnos en su edad más temprana”.
La moción rubricada por PSOE y Unidas Podemos cuenta con cuatro puntos de los cuales “sólo han salido adelante dos con un acuerdo de mínimos, que es el respaldo desde el Ayuntamiento a las familias afectadas, a los niños y a los trabajadores. Pero este respaldo no es suficiente, necesitamos que la Junta de Andalucía rescate la concesión o que le ofrezca a los trabajadores la gestión del centro a modo de cooperativa como están pidiendo”. Los votos en contra de PP y de Ciudadanos a los puntos 2 y 3 han frenado precisamente esta posibilidad. “Una defensa tan tibia de la educación infantil sólo merece ser calificada de una manera. Les están dando la espalda a más de un centenar de familias”.
“Si ya entramos en el terreno de la conciliación y de la mujer, la corresponsabilidad en el hogar todavía está lejos de ser una realidad. La estructura de la familia puede ser muy diversa, pero no es raro encontrar familias monoparentales, con uno o varios menores a cargo, o familias en las que alguno de sus miembros tengan algún tipo de discapacidad”, ha continuado Viruel, que ha criticado cómo la empresa Arunda comunicó a los trabajadores el cierre inminente, con un ERE para la plantilla sin opción si quiera a la finalización del actual curso el 31 de julio. Con un simple escrito en la mochila de los niños, daban carpetazo a medio siglo de convivencia en el barrio del mismo nombre sin más explicación que ya no era rentable, cuando hace pocos meses la misma empresa hacía un desembolso de más de 3 millones de euros para la compra del edificio, algo chirria”.
Con los votos en contra de PP y de Ciudadanos se pierde la oportunidad para exigir a la Delegación Provincial de Educación “que tome todas las medidas necesarias para mantener abierta y activa la guardería de la Paz, incluso prorrogando el funcionamiento del centro más allá de la finalización de este curso”. Además, Viruel ha criticado que ambos grupos de la derecha en el Ayuntamiento se nieguen a secundar “una mesa de diálogo de apoyo a las familias junto con el sector de las escuelas infantiles, que garantice la viabilidad de estas empresas y acabe con el cierre inesperado de estos centros debido a la asfixia económica de la actualización de precios”.
“Para el PP la educación es mucho ruido y pocas nueces”, se ha referido Rubén Viruel a las reuniones mantenidos por el delegado provincial de Educación, Miguel Briones, con padrs y madres afectados, también con trabajadores, por el cierre de la guardería y la amenaza de expedientes de regulación de empleo. “La rentabilidad en los temas sociales no se mide en euros, se mide en igualdad de oportunidades, se mide en esperanza y se mide en el futuro de nuestros niños y niñas”, ha zanjado por su parte.
Málaga Ha Vesos
Durante la misma comisión de Derechos Sociales se ha debatido otra moción conjunta de PSOE y Unidas Podemos tras la petición de la plataforma Málaga Ha Vesos, que aún a colectivos sociales y culturales de la ciudad para aumentar la participación ciudadana en los temas de ciudad. La concejala Carmen Martín, que ha defendido la moción por el grupo socialista, ha recriminado a PP y Ciudadanos su oposición “a un texto propositivo, que trata de dar más voz a quienes confían en nuestro trabajo para gestionar la ciudad, los propios ciudadanos”.
Martín ha expresado que “si hubiera participación en nuestro ayuntamiento se habría preguntado a los vecinos de Huelin y de Cruz de Humilladero antes de imponer una zona azul que no querían; se hubiera preguntado a los vecinos de La Pelusa en Málaga Este antes de permitir una gasolinera junto a viviendas, colegios y una residencia de mayores, se preguntaría a los comerciantes por la localización adecuada de los carriles bici. Hablando de carriles bici, vaya desastre en La Alameda. Primero se olvidaron de él. Ahora, lo han improvisado en una zona que echa a pelear a peatones y ciclistas”. Para la socialista, “mociones como esta tratan de aumentar la participación, una participación a la que ustedes dan la espalda”.