Los socialistas presentan una moción para pedir al equipo de gobierno “medidas contundentes contra un problema que está dando una imagen muy negativa de la ciudad y acabando con el descanso de las comunidades de vecinos del Centro”
El Grupo Municipal Socialista ha pedido al Ayuntamiento de Málaga “medidas contundentes para frenar el turismo de borrachera en las calles del centro”, con una moción que se defenderá en el próximo y que prevé el aumento de la vigilancia policial y la regulación de las viviendas turísticas mediante una modificación del PGOU, además “del estricto cumplimiento de la normativa contra el ruido”. Lamentablemente, “Málaga se está consolidando como un destino de este turismo de borrachera. Situaciones dantescas grabadas por vecinos un día sí y otro día también. Videos que son prueba recalcitrante de la degradación, no solo de la calidad de vida de malagueños y malagueñas, sino de la imagen de nuestra ciudad”, ha expresado Daniel Pérez.
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha explicado los términos de esta moción en compañía de los concejales Pablo Orellana, Carmen Martín y Alicia Murillo. Pérez urge al alcalde de la ciudad “a preocuparse ante un problema que está poniendo en jaque la convivencia en el centro entre residentes y hosteleros. Paco de la Torre no debe escabullirse de sus obligaciones. No está bien que deje este problema en manos de los hosteleros sugiriéndoles que no atiendan a quienes lleven dos copas de más”. El socialista ha recordado que “Málaga tiene un déficit de más de 300 agentes de policía según datos de la FEMP y que esta carencia se ve en momentos como el que padecen los malagueños actualmente, con un centro de la ciudad donde Paco de la Torre ha perdido el control”, ha agregado el líder socialista. Pérez ha alertado de que “este problema der convivencia afecta principalmente a las comunidades de vecinos, con denuncias como la que vimos este fin de semana en un vídeo de una mujer que permitía bañarse a su hija en la fuente de Plaza del Obispo, una pieza patrimonial del siglo XVIII que se ha restaurado hace pocos meses”.
Asimismo, Pérez insta al equipo de gobierno a “resolver este problema de raíz, frenando el descontrol con la falta de regulación de los pisos turísticos, que es donde se alojan quien la lían en nuestras calles”, a la vez que ha recordado que en diciembre de 2020 se aprobó por unanimidad en el pleno municipal “consensuar con los agentes sociales implicados la modificación del PGOU para regular el uso de las viviendas turísticas, un paso que ya dio Bilbao para establecer un número clausus en su centro histórico y que ha ayudado a combatir los efectos negativos de este turismo de bajo coste, el de borrachera y escándalo”.
Daniel Pérez ha zanjado su intervención exigiendo a Francisco de la Torre “que se huya de sus responsabilidades, que cuando nos acercamos a la normalidad tras la pandemia vuelven los problemas del pasado, de una ciudad que adolece de modelo turístico y de control. Necesitamos un modelo turístico que persiga la calidad, un modelo cohesionado que trabaje para aumentar el gasto medio por turista y el número de pernoctaciones, que consiga alargar el período vacacional más allá del verano”.
Este problema de ruido en el centro de Málaga llega apenas unas semanas después de que una sentencia judicial dé la razón a varios vecinos de la Plaza Mitjana, que deberán ser indemnizaciones por el Ayuntamiento “por la falta de acción tras superarse en repetidas ocasiones los límites a la contaminación acústica en nuestra ciudad”, ha señalado por su parte el concejal socialista Pablo Orellana, que defenderá la moción durante la próxima sesión plenaria. El socialista ha informado que “Mojácar, Logroño, Madrid, Tarifa, Salamanca o Tossa de Mar son las ciudades que han puesto freno a las despedidas de soltero con distintas medidas como el aumento de la presión policial o multas que pueden rondar de los 300 a los 3.000 euros a aquellos que usen megáfonos o disfraces inadecuados en sus calles”.
Orellana ha pedido al equipo de gobierno local “que se pongan en marcha medidas que garanticen el cumplimiento de las ordenanzas municipales en materia de ruido y convivencia ciudadana que resuelvan los niveles excesivos de ruido que padecen las vecinas y vecinos del centro”. Además, ha propuesto la constitución de una mesa de trabajo “para abordar con todos los agentes sociales el problema de modelo de ciudad que vive la ciudad de Málaga”. Según el socialista, responsable de Turismo en este grupo, “no se debe permitir la imagen tan negativa de Málaga que ya vemos de nuevo en televisiones nacionales, porque se está permitiendo un turismo de borrachera, principalmente por despedidas de solteros, que acampa a sus anchas en nuestras calles con disfraces, gritando, con megáfonos e incluso con altavoces al hombro. Esto es lamentable en una ciudad como Málaga”.
“Y ni los vecinos ni quienes viven del turismo se pueden permitir este tipo de turismo que devalúa a Málaga como destino turístico y como lugar de residencia. Los vecinos y vecinas ya han perdido la confianza en las medidas, ya sean nuevas o puestas ya en marcha, del Ayuntamiento de Málaga. Después de cinco años que se pusieron en marcha las mesas de trabajo para tratar este problema no ha remitido, sino que ha empeorado. Este equipo de gobierno ha perdido toda la credibilidad que tenía”, ha denunciado el responsable socialista en el área de Turismo.
Para Orellana, “el problema de las despedidas es estructural y se debe a que la ciudad tiene todas las características necesarias para atraer a este turismo de borrachera. En primer lugar, el ayuntamiento no ha regulado los alojamientos turísticos pudiendo hacerlo en el Plan General de Ordenación Urbana y, en segundo lugar, la permisividad del ayuntamiento que es palmaria por la falta de cumplimiento de las ordenanzas municipales”. Por eso, pide a De la Torre “que haga cumplir las ordenanzas, porque la lucha contra el ruido es competencia del Ayuntamiento”, ha agregado. “Tenemos que repensar nuestro modelo de ciudad, no una Málaga que legisle solo para el visitante”, ha zanjado.
Durante la rueda de prensa ha tomado la palabra una vecina del centro histórico, Antonieta Marín, que hace unas horas denunció con un vídeo en una red social el baño de una menor en la fuente de Plaza del Obispo. “No entiendo cómo a Paco de la Torre no le importan estas conductas. Se le ha escapado el control de la ciudad y está permitiendo que aquí no haya quien duerma ni de día ni de noche”, ha denunciado Marín. “En mi bloque hay cinco viviendas turísticas y una de ellas tiene 20 camas, esto es inadmisible”, ha exclamado Antonieta Marín, que ha desvelado que está pensando en vender su casa. “Si Paco de la Torre no va a hacer nada, tiene que dar un paso al lado, irse y darle la oportunidad a personas jóvenes que vienen con más energía para hacer de Málaga un lugar en el que vivir, porque la situación se le ha ido de las manos”, ha zanjado.