Los socialistas demandan la regularización de este tipo de pisos en los barrios “porque se ha perdido la esencia del PGOU sobre los domicilios residenciales, que han pasado a convertirse en un negocio que hace subir los precios del alquiler, mientras que en nuestra ciudad hay más de 21.000 familias demandantes de un hogar” y Málaga se ha convertido en la segunda capital con mayor volumen de pisos turísticos de España, según el INE
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha pedido al Ayuntamiento de Málaga que inicie los trámites para establecer un número clausus de viviendas turísticas en la ciudad de Málaga amparándose en una reciente sentencia del Tribunal Supremo. Según el socialista, para garantizar la convivencia en los barrios y poner a disposición de las familias demandantes un lugar en el que vivir, “proponemos al equipo de gobierno que se limite el número de vivienda turísticas en la ciudad, sobre todo en los barrios, donde el precio del alquiler subió exponencialmente con el boom de este tipo de negocios. Se ha expulsado a los vecinos del centro y de muchos barrios con la falta de acción del equipo de gobierno. Es el momento de actuar, ahora que muchos dueños de esas viviendas buscan estímulos para devolver sus viviendas al alquiler de larga duración”.
“El tirón de las viviendas turísticas en nuestra ciudad elevó los precios del alquiler hasta convertirnos en una de las capitales más caras en el arrendamiento”, defiende el líder socialista, que ha agregado que “Málaga es la segunda capital con mayor volumen de pisos turísticos de España, según el Instituto Nacional de Estadística”. Por esto, el socialista ve el momento “para que estas casas y pisos no se queden cerrados a cal y canto y den una oportunidad a las familias”. Se trata de “cuidar el equilibrio entre vivienda de uso turístico y vivienda de uso residencial, a fin de garantizar los derechos y obligaciones de ambas partes”, ha agregado el portavoz socialista, que ha recordado que “esta propuesta ya la hizo el pasado mes de junio el grupo socialista”.
Así lo ha manifestado el portavoz socialista durante una rueda de prensa en el barrio del Soho, en compañía de las concejalas Carmen Martín, responsable por la formación del distrito Centro, y de Alicia Murillo, responsable del área de Vivienda en el grupo socialista. Pérez ha puesto como ejemplo para este número clausus de vivienda turística al Ayuntamiento de Bilbao, que en el año 2017 modificó el Plan General de Ordenación Urbana en lo relativo a la regulación del uso de este tipo de alojamientos. “Entre las modificaciones, fueron aprobadas la calificación de las viviendas de uso turístico como equipamiento en lugar de inmueble residencial, lo que supone que solo pueden ser viviendas turísticas las situadas en planta baja o primera planta, salvo que tengan acceso independiente a la calle”.
“Además, en Bilbao también es necesario un informe urbanístico para aquellos alojamientos turísticos que quieran operar como tal y se establece un máximo de tres habitaciones de estas viviendas para alquiler turístico”. Dichas modificaciones fueron recurridas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia y “en los últimos días hemos conocido que el Tribunal Supremo ha terminado dando la razón al Ayuntamiento de Bilbao y por tanto, respalda que los ayuntamientos limiten las viviendas turísticas para proteger el entorno urbano”. De ahí que el líder socialista propone al alcalde, Francisco de la Torre, que reflexione sobre esta medida.
Conversión a larga duración
Además de la limitación de viviendas turísticas en la ciudad, con la bajada de ingresos de sus propietarios por la reducción del turismo en nuestra ciudad, Pérez informa que “más de 21.500 familias son demandantes de vivienda, de las cuales más del 85% se han mostrado más proclives al régimen de alquiler que a la compra”, citando datos del Registro Municipal de Demandantes de vivienda del Ayuntamiento de Málaga. De ahí que pida al Ayuntamiento “que incentive la conversión de estas viviendas turísticas que a día de hoy tienen la persiana bajada en alquiler de larga duración”. A través de un Plan de Incentivos para la Recuperación Social de Viviendas Turísticas en alquiler tradicional, sus propietarios “podrán beneficiarse de las herramientas del Ayuntamiento en materia fiscal, económica o de otra índole como podría ser por ejemplo el asesoramiento jurídico, para estimular la ampliación del parque de viviendas de alquiler residencial de nuestra ciudad”.
Según el líder socialista, “el acceso a la vivienda era y sigue siendo un problema en nuestra ciudad. Es más, si la hipótesis de que la conversión de vivienda para alquiler turístico en alquiler residencial ha hecho bajar el precio de los alquileres fuera cierta, todo hace prever que cuando se vuelva a recuperar el turismo, esas viviendas podrían retornar al mercado de alquiler turístico y volver a generar una subida de los precios de los alquileres residenciales, lo que sería catastrófico para las familias más humildes que no tienen una vivienda en propiedad”.
Estudio de las zonas con viviendas turísticas
Por su parte, la concejala socialista Alicia Murillo, ha instado también al Ayuntamiento de Málaga a presentar en un plazo de 6 meses el estudio de zonas de viviendas turísticas de la ciudad. “El Ayuntamiento de Málaga ha anunciado en varias ocasiones que está realizando un estudio que permita conocer por distrito cual sería el equilibro óptimo entre viviendas turísticas y residenciales. Las últimas referencias en prensa sobre este tema son de julio de 2019 pero seguimos sin tener información sobre este mapeo”.
La edil socialista ha aprovechado la cita con los medios para recordar que “las ayudas municipales para el alquiler de vivienda no ayudan”.El Ayuntamiento de Málaga puso en marcha en 2015 el primer Plan de Ayuda al Alquiler, un plan que se ha ido prorrogando a través del Plan de Ayuda al Alquiler 3 aprobado en 2018 y vuelto a prorrogar a finales de 2019. También creó un Segundo Plan de Ayuda al Alquiler y un Quinto Plan aprobado en 2020. “Estos planes han llegado a parte de la población más vulnerable, pero sin duda el gran fracaso ha sido que se han convertido en ayudas que no han ayudado, en especial a las 447 familias del segundo plan que nunca consiguieron encontrar una vivienda. Lo que pone de manifiesto nuevamente, la dificultad de acceder a una vivienda en alquiler”, ha zanjado la concejala socialista Alicia Murillo.
Si soy alcalde de Málaga, eliminaré la zona azul en Huelin y Cruz de Humilladero
A preguntas de los periodistas sobre su opinión acerca de la implantación del SARE en nuevas calles de Málaga, el portavoz socialista, Daniel Pérez, ha expresado que “si yo soy alcalde de la ciudad de Málaga en 2023, eliminaré la zona azul en el barrio de Huelin y de Cruz de Humilladero, porque se ha implantado sin consenso con los vecinos”. El líder socialista ha recriminado al equipo de gobierno, con su alcalde a la cabeza, “que no escuchan a los residentes de ambas zonas de nuestra ciudad, que le han dicho por activa y por pasiva que no quieren la zona azul, ni en Huelin ni en Cruz de Humilladero”. Hay que recordar que la Plataforma Huelin contra el SARE, formada por 1500 residentes en el entorno de Tomás Echeverría, con el respaldo de las asociaciones vecinales mayoritarias y que se ha manifestado en siete ocasiones en nuestra ciudad, ha presentado 1856 firmas contra la zona azul en el Registro del Ayuntamiento. En el caso de Cruz de Humilladero, tras conseguir en septiembre de 2019 que Francisco de la Torre diera marcha atrás cuatro veces en la implantación del SARE, ahora critican que la zona azul empezará a partir del 12 de enero.
“Paco de la Torre y Pepe del Río, responsable de Movilidad en el Ayuntamiento, han creado un auténtico problema en Huelin, porque han eliminado la primera fila, porque los vecinos de calles colindantes a las afectadas por el SARE no quieren pagar por aparcar”. Por eso, el socialista anima al regidor “a salir del despacho y a visitar la zona, a hablar con sus vecinos, que le dirán que han creado una presión a la hora de encontrar aparcamiento alternativo al SARE que antes no existía. Un empleado de un comercio de Huelin me dijo ayer que ahora tarda hasta 45 minutos para encontrar aparcamiento al ir al trabajo”.